PARA ENAMORADAS Y ENAMORADOS

Y Yo le resucitaré, en el día final

Juan 6, 48-51

Yo soy el pan de vida. Vuestros antepasados, que comieron el mana en el desierto, murieron. Aquí tienen el pan que bajo del cielo para que lo coman y ya no mueran. Yo soy el pan vivo bajado del cielo; el que coma de este pan vivirá para siempre. El pan que yo daré es mi carne, y la daré para vida del mundo.


Estimados Apoderados del Kinder A y B:

Qué sentido podría tener caminar por el centro de la ciudad un día lluvioso de domingo, con frió y chapoteando sobre una alfombra empapada de cuatrocientos metros de longitud, para trasladarse en fila de un templo a otro. Bueno, el sentido lo da el hecho de unirse a un grupo compacto de personas enamoradas del Cuerpo Sacramentado del Señor (Corpus Christi), y que desean acompañarlo en un paseo especial, fuera de donde él normalmente habita.

Diseño de Alfombras, en momento previo a la Procesión del Corpus Christi

Un enamorado no pasa frió y si hay lluvia juega con la humedad haciéndola suya. Porque aquí lo que verdaderamente importa no es el clima o lo bonitas que hayan quedado las alfombras (que de paso las Hermanas ejecutaron muy estupendamente), lo que interesa, mas bien, es marcar la ruta que deben seguir los enamorados de Jesús. A los cuales se les ha pedido una prueba mayor que la de soportar agua y frió. Su prueba de amor es la felicidad de pertenecer a ese grupo de personas (como millones más en el mundo que no pudieron asistir a la procesión) las cuales han podido creer sin haber visto (don de la fe), que creen que el Señor se encuentra oculto en el Santísimo Sacramento del Altar (del pan y el vino) y que el mismísimo Dios se entrega a nosotros como alimento para la vida eterna, nuestra meta.

Alfombra Corpus Christi Colegio Mariano 2009, frente a la Catedral de Santiago.Fin